NO ME FÍO DE LOS MÍOS
A la maldad solo le fío la distancia, a la guerra; la ausencia, a la bondad; cercanía, a la paz; puertas abiertas, a la amistad; la bienvenida, al amor; la vida, el ser, la existencia…
Como carnívoro no me fío de mis instintos de supervivencia.
Como persona de carne y hueso no he de fiarme de otras fieras.
Tengo alma y espíritu, ideales y conciencia; no puedo fiarme de nadie que de ellas se alimenta.
Ni como lobo ni como oveja he de fiarme de los pastores de las iglesias.
Ni pobre ni rico confío en los políticos, ni en su opulencia ni en su pobreza.
En mis enemigos sí confío; ellos no defraudan, no abandonan, nunca traicionan…
No quisiera fiarme del hambre; ni de las letras; ni de los versos; ni de las lenguas; ni del mar o del viento o del fuego…, ni, siquiera, de la tierra.
En definitiva: no puedo fiarme de nada ni nadie del que yo forme parte de su dieta, ni viceversa...
Manzanares el Real, 11/12/2022
Pedro Moreno «Parrina»