ME CAGÜEN TO
-La Angustias -madre- Que se encontraba a prepósito a la puerta esperando a la su hija-
-Como te güelva a ve con ese cogía de la mano por la calle como si fueras una cualquiera, me vi a cagá en to lo mas barrío. A ve si me le echo a la cara, que le vi a decí cuatro cosas bien dichas. ¿Pero que s’a llegado a pensal ese?..., ¿cómo es que se llama?..., ¿Fermín, no? el hijo del Sebastián y la Fermina, ¿y qué se cree, que porque tenga unas poquinas tierras tié derecho a il pavoneándose contigo sin habel venío a la casa a pedí la mano a tu padre? Mira, mira, que no pueo ni respiral, que estoy desalientaita perdía… Y que tengamos que aguantá estal en boca de toa la gente sin habel dao nunca motivos y agora porque te estás moceando no haiga otra cosa de la que hablal en el pueblo.
-La Angustias -hija- Que se encontró a la su madre, como estaba previsto, a la puerta de casa.
-Fue un descuío madre, si no nos cogemos a penas nunca de la mano pa no provocá habladurías, la gente es que es mu envidiosa y mu mal pensá, na más nos estábamos despidiendo y el Fermín s’a agarró por casualiá un momentino pa icime que tenía las manos agrietás y debiera usá aceiti para suavizá-las.
-La Fermina – madre del Fermín y vecina- que pasaba por allí, no sabemos si a prepósito o por casualiá, que lo más seguro es que juera por lo primero-
-¿Qué m’an dicho, que la tu muchacha s’a agarra al mi Fermín que no hay quien la despegue d’él?
-La Angustias -madre-
-Fermina, no m’alteres, no m’alteres más de lo que estoy, que no respondo de mí, qué prontino t’an informao ¿eh…?, cómo corren las malas lenguas…, esa en seguro qu’a sio la tu vecina de por cima, la Paca, que paeci que no tie otra cosa que jacel que estal to el día barriendo la fusca a la puerta, que es lo único que barre porque la casa la tié comía en mierda, porque otra cosa no, pero guarra es un rato guarra, a vel si barre algún día pa fuera y que salga to lo que tie que salí, que aquí la que más y la que menos tié lo suyo, porque me vi a callál porque no quiero hablal del su muchacho, el que s’escapó con el panaero y se jueron a vivil a los madriles, que esos también dieron bien de que hablá. Pues mia que a lo mejó agarro un día y me vi a cagá…, me vi a a cagá…, lo vi a dejá estal asín, pero vamos, que…, me cagüen to.
Madrid, 29 de abril de 2021
Pedro Moreno «Parrina»